sábado, 25 de diciembre de 2010

MÁS MARINAS SURFERAS


REFLEJOS 55X46 200 €


FUEGO 65X50 300 €
CORONA 35X27 100 €

martes, 30 de noviembre de 2010

KANDISKY




 COMPOSICIÓN VIII


Esta obra es pura geometría. Vemos un fondo casi plano pero tiene unos tenues colores que dan sensación de profundidad de infinitud de espacio profundo.

-El destaque está en la esquina superior izquierda con esos círculos concéntricos cuya corona negra destaca del resto del cuadro que está en colores más suaves.

-Los círculos concéntricos se repiten sobre toda la superficie del cuadro hábilmente distribuidos.

-Hay otros círculos que parecen tener una sombra proyectada.

-Hay triángulos y cuadriláteros engarzados de diferentes formas, unos formando cuadrículas regulares e irregulares.

-Hay líneas rectas que parecen dirigidas en direcciones concretas que crean una tensión. Hay grupos de arcos tangentes que son semicírculos apoyados en una recta.

-Hay líneas rectas cortadas por dos paralelas.

-Hay una onda que se amortigua en el tiempo.

-Hay algunas figuras que se superponen a otra y la zona superpuesta cambia de color como si fueran transparentes y se mezclaran los colores.

-Hay dos rectas convergentes que parecen ser los radios de unos arcos también convergentes pero no lo son.

-Hay líneas que van hacia las esquinas creando mucho dinamismo.

--Hay triángulos y ángulos con el vértice hacia arriba

Considerando los paralelismos que Kandisky hace entre pintura y música, yo diría que los círculos son notas largas “redondas” (notas: redonda, blanca, negra, corchea, semicorchea, fusa y semifusa), graves las grandes y más agudas las más pequeñas, la aureola es la vibración o sonoridad, las cuadrículas son acordes (notación antigua mediante cuadraditos), los triángulos son notas penetrantes agudas y cortas y los arcos son calderones que alargan la nota, dos líneas paralelas que cortan una recta perpendicular o inclinada es una caesura que indica pausa silenciosa, los arcos semicircunferencias son ligaduras que unen notas que suenan de forma continua, los ángulos son crescendo y descrescendo referido al volumen o intensidad del sonido. 

-La onda amortiguada corresponde a cualquier sonido de percusión, incluido el piano, que al dar una nota el sonido se amortigua paulatinamente. 

-Las líneas rectas anchas son compases de espera. 

-El triángulo curvo negro que está a la derecha del anillo negro grande es “la cola” que se añade a una nota “negra” (duración 1 tiempo) para simbolizar la “corchea” (duración ½ tiempo). 

-Dos líneas paralelas verticales situadas en la parte superior a la derecha del triángulo amarillo representan la “clave neutral” usada para el pentagrama de un instrumento de percusión. 

-A la derecha de esto, un poco más abajo hay una cuadrícula de la que parten 5 líneas paralelas que tienen unos cuadraditos grises y negro es el pentagrama con notación antigua en que las notas eran cuadraditos.

-A media altura y ligeramente desplazado del centro se ve un círculo o anillo en el que convergen tres triángulos de varios colores con un ángulo muy pequeño, muy cerrado. Este anillo es una caja de percusión, semejante a un tambor. 

-A su derecha se ve un círculo mitad negro mitad blanco y dos anillos uno rojo y otro amarillo que le circunda pero la mitad queda oculto debajo del triángulo rectángulo que en esa zona es verde, estos anillos son un platillo de percusión.

Por tanto esta obra representa una composición musical y los instrumentos que intervienen.

Antonio Sánchez-Gil http://arteycartelera.es

miércoles, 24 de noviembre de 2010

MIS NIETOS PEQUEÑOS


IVÁN 45,5x31,5 pastel sobre papel Canson


CARLA 45,5x31,5 pastel sobre papel Canson

Antonio Sánchez-Gil http://arteycartelera.es


domingo, 7 de noviembre de 2010

DOS MARINAS MÁS

TÚNEL EN AMANECER 650X50 300€


OLA EN LA PLAYA 65X50 300€


Espero que os gusten y me las compréis

lunes, 18 de octubre de 2010

OLAS "SURFIANAS"



Siempre había pintado el mar desde fuera, pero esta vez lo estoy pintando desde dentro.
Antonio Sánchez-Gil http://arteycartelera.es

viernes, 20 de agosto de 2010

TOULOUSE LAUTREC














Henri Marie Raymond de Toulouse-Lautrec-Monfa Tapié de Celeyran, conde de Toulouse-Lautrec-Monfa, conocido simplemente como Toulouse Lautrec (Hôtel du Bosc, Albi 10 noviembre 1864, 9 de septiembre de 1901) fue un pintor y cartelista francés que destacó por su representación de la vida nocturna parisiense de finales del siglo XX Se le enmarca en la generación del postimpresionismo.

Nació en el castillo de Albi en el seno de una familia de la nobleza. En su familia, como era habitual en muchas sagas de la gran aristocracia, los matrimonios se realizaban entre parientes para evitar las divisiones territoriales y la dispersión de la fortuna. Éste fue el caso de los padres de Henri, el conde Alphonse de Toulouse-Lautrec-Monfay Adèle Tapié de Celeyran que eran primos en primer grado. La endogamia hubo de condicionar la salud del artista. Henri fue el primogénito y cuando tenía cuatro años, nació su hermano Richard-Constantine, que falleció un año después. Por desavenencias, sus padres se separaron en 1868 y Toulouse-Lautrec quedó bajo el cuidado de su madre.

Su infancia fue feliz hasta que, como consecuencia de la consanguinidad de sus padres, Toulouse-Lautrec padeció una enfermedad que afectaba al desarrollo de los huesos y que comenzó a manifestarse en él en 1874. Su constitución ósea era débil y entre mayo de 1878 y agosto de 1879 sufrió dos fracturas en los fémures de ambas piernas, que le impidieron crecer más, alcanzando una altura de 1,52 m.

La obra de Toulouse-Lautrec se caracteriza por su estilo fotográfico, al que corresponden la espontaneidad y la capacidad de captar el movimiento en sus escenas y sus personajes, siendo el suyo un estilo muy característico. A esto hay que añadir la originalidad de sus encuadres influencia del arte japonés, que se manifiesta en las líneas compositivas diagonales y el corte repentino de las figuras por los bordes. Poseía una memoria fotográfica y pintaba de forma muy rápida. Sin embargo, su primera influencia fue la pintura impresionista y, sobre todo, la figura de Degas, de quien siguió la temática urbana alejándose de los paisajes que interpretaban Monet o Renoir. Fue la vanguardia del modernismo y del Art Nouveau.

Además de la pintura al óleo, Henri utilizó otras técnicas y otros soportes en su obra, destacando su producción de carteles. Usó especialmente el pastel sobre papel marrón de envolver.

Su técnica con el óleo era mezclando los colores con trementina para obtener un efecto semejante a la acuarela y resolvía sobre el lienzo mediante pinceladas largas, como líneas paralelas o cruzadas o formando un entramado, gruesas o finas según el caso.

En los carteles utilizaba colores planos y el dibujo se caracterizaba por su tendencia a la caricatura donde con un mínimo de trazos retrataba el carácter y personalidad del personaje.




jueves, 22 de julio de 2010

VERMEER














JOHANNES VERMEER.

Vermeer nació en la ciudad de Delft (Holanda) en 1632, vivió toda su vida en los Países Bajos hasta su muerte en 1675.

Cuando hoy contemplamos estas maravillas nos resulta increíble que este pintor barroco holandés cayese en el olvido durante el siglo XVIII. Fue un crítico de arte francés quien lo descubrió en el siglo XIX y hoy en día es de los pintores más reconocidos y admirados.

Las obras de Vermeer nos ilustran sobre la realidad de la rica y opulenta Holanda del siglo XVII, cuando, gracias al comercio, estaba en la cima de su imperio colonial. Salvo en dos casos en que el pintor nos muestra dos vistas exteriores (una de ellas aquí expuesta), la generalidad de sus cuadros son o bien retratos, o bien escenas interiores de los salones de la burguesía neerlandesa.

El esquema compositivo se repite: una ventana abierta en el lado izquierdo deja entrar la luz natural y entre rico mobiliario, vestimenta y joyas se desenvuelven uno o dos personajes, predominantemente femeninos.

La protagonista es siempre la mujer, tratada de forma muy delicada, detallista y sensual. Ella ríe, duerme, cose o trabaja, siempre bañada por una sugerente y tamizada luz que juega enormemente con los claroscuros. La dama va generalmente vestida con riquísimos vestidos, tocada con joyas y cuidadosamente peinada. El interior representado explota en detalles como lámparas, muebles, tapices, cuadros, mapas, suelos alicatados, etc.

A pesar de esta presencia de personajes, lo verdaderamente importante para Vermeer es el espacio y la luz. Los personajes son accesorios.

Vermeer se convierte así en el pintor de la intimidad, de lo recogido y sosegado, de lo tranquilo y lo sugerente. Su luz es mágica: dorada y sensual, consigue subrayar la atmósfera y el aire, con un poco de imaginación podríamos ver las motas de polvo flotando visibles a la luz lateral de la ventana.

La contemporaneidad de Vermeer, el que nos guste tanto hoy, es debido a que sus óleos no nos narran nada, no hay que adivinar ni interpretar historias, solamente se trata de imágenes presentativas, ni mitología, ni religión, ni literatura, sólo imágenes inmediatas, casi “televisión” y por eso nosotros, seducidos por una cultura de imágenes inmediatas , nos sentimos automáticamente cautivados por estos cuadros.

Cuando pinta exteriores (sólo dos) Vermeer hace gala de un temprano impresionismo, al captar la luz y el aire como harían dos siglos después los impresionistas franceses.

Ni que decir tiene que estos impresionistas admiraban profundamente a Vermeer, así por ejemplo, Renoir dice de su cuadro “La Encajera” que es una de las dos mejores telas del Louvre.

En cuanto a Van Gogh, escribe a su hermano Theo refiriéndose a Vermeer: ”La paleta de este extraño artista comprende el azul, el amarillo, el gris perla, el negro, el blanco.......con un gusto extraordinario y un infalible sentido de la composición”.

viernes, 2 de julio de 2010

LA ÚLTIMA CENA





LA ÚLTIMA CENA de Leonardo Da Vinci

Es una obra fantástica por su concepción y por su resolución, lástima que el tipo de pintura que experimentó Leonardo resultara fallida y además me resulta extraño que se metiera a experimentar una pintura en la obra definitiva sin haberlo probado antes.



Cromáticamente hablando es una obra que mantiene los cánones religiosos en cuanto a los colores empleados con los rojos, azules y verdes, amarillos dorados, púrpura y algunos ocres. Observar como Jesús lleva túnica roja y manto Azul, mientras la figura de su derecha lleva túnica azul y manto rojo, este último es como se solía vestir a la Virgen María por ello dudo mucho que se trate del apóstol Juan, además en la esquina de la derecha en el mantel hay un nudo y hay quien dice que eso significa que hay una mujer entre los hombres. El rostro de ese personaje es joven, luego no puede ser la madre de Jesús, por tanto cabe pensar que se trata de María Magdalena como se dice en EL CÓDIGO DA VINCI.

Es una obra construida sobre la simetría y la perspectiva como efectos básicos de la composición estando Jesús en el centro del cuadro en sentido horizontal y a su vez está justo en el punto de fuga de la perspectiva central.

La composición básica es “Radial” lo que viene a significar expansión, gloria, esplendor, devoción y guía la mirada hacia el centro que sugiere concentración , unidad y poder.


Los personajes están agrupados en “Rectángulos” cuyo significado es unidad y estabilidad. En el centro está Jesús inscrito en un “Triángulo isósceles” armonizando con los anteriores significados como grandiosidad, seguridad, equilibrio, majestuosidad.


Según manuscritos del propio Leonardo, los apóstoles de izquierda a derecha y por grupos de tres son Bartolomé, Santiago el Menor y Andrés. Judas Iscariote, Simón Pedro y Juan (María Magdalena). Tomás, Santiago el Mayor y Felipe. Mateo, Judas Tadeo y Simón Zelote.


 Así vemos que los elementos compositivos han sido perfectamente elegidos para transmitir a nivel subliminal las sensaciones correspondientes al auténtico significado del cuadro.

Al agrupar de tres en tres a los personajes se crea un ritmo que se centra en el polígono de tres lados en que envuelve a Jesús y que recuerda también la Trinidad.



El número tres está representado por los tres ventanales del fondo y las columnas que hay a derecha e izquierda y el cuatro por los huecos que hay a derecha e izquierda entre las columnas. Sumados 4+3 nos da 7 que es uno de los números mágicos y que aplicamos a la semana, pero que viene a significar el planeta Tierra contando desde Plutón hacia Mercurio. Son los 7 días o períodos de tiempo que llevó a Yahvé la Creación del Universo.

Como todo el mundo sabe el 12 también es número mágico y así tenemos 12 meses en el año, las 12 constelaciones del Zodíaco, 12 tribus de Israel, 12+12 horas del día terrestre y los 12 apóstoles.

Como se sabe el Renacimiento se caracteriza, entre otras cosas, por ensalzar el género humano y su sabiduría, para lo cual los grandes artistas recurren a los conocimientos esotéricos, matemáticos y filosóficos a la hora de plasmar sus obras, dotándolas de un doble significado, así podemos ver las obras de Botticelli, Da Vinci, Miguel Ángel, El Greco, Durero, El Bosco, Rafael, etc. por citar solo a los más conocidos, en las cuales siempre encontraremos significados y códigos, unos descifrados y otros no.

Todos los que he nombrado antes y algunos más, colocaban siempre en sus pinturas algo que no era lo que parecía pues tenía sus mensajes especiales. Esto hoy para nosotros es difícil de entender, pues tenemos una mentalidad muy diferente.

Pienso que si en la cena de Leonardo no hay carne sino pescado es precisamente porque se quiere significar la Era de Piscis, tan utilizada por la Iglesia esta simbología, en la que aún estamos y que debido a la precesión de los equinoccios, la Tierra en su vuelta alrededor del Sol, en vez de volver exactamente a la misma posición, sufre un desplazamiento o retraso respecto al zodíaco de 1º cada 72 años, por tanto, como cada sector del zodíaco ocupa 30º (360:12) recorrer los 30º para cambiar de casa o zona zodiacal suponen 2160 años, por eso pasaremos a la Era de Acuario alrededor del 2100. Este tema del zodíaco se viene utilizando desde la civilización sumeria, al menos, probablemente desde antes, en otro momento explicaré porque lo creo así, debido al desciframiento o lectura de múltiples tablillas de origen sumerio o caldeo que hablan de lo que sucedió antes de ellos.

También falta el cáliz, porque sabido es el significado que se le da en la Iglesia al Santo Grial, el cáliz, pero no es así según varios autores, pues la raíz es Sang Real, es decir Sangre Real, y recordando que Jesús era descendiente de la casa de David, era pues príncipe, y cuando se habla de la Sangre Real se refiere al linaje de Jesús, es decir, los hijos que tuvo con María Magdalena que según varias investigaciones huyó al Languedoc donde se formó una colonia de los que luego serían los cátaros, atacados por la Iglesia, en manos del rey de Francia, hasta la extinción en el castillo de Montsegur y que solo se salvaron los descendientes de Jesús, un niño y una niña, con ayuda de los Templarios. Por tanto cabe pensar que Leonardo no quiso ponerlo para denotar que lo que hay no es lo que parece, sirviendo su ausencia de alarma.


Todos los personajes miran hacia Jesús menos Juan (María Magdalena) que está asustada porque Pedro la sujeta del hombro con cara de pocos amigos y mantiene el cuchillo en la mano derecha. El apóstol de al lado, Andrés, levanta las manos como diciendo ¡ten cuidado! Y el grupo de tres del lado derecho están discutiendo. Judas con su bolsa conteniendo las 30 monedas de plata.

El cuchillo en la mano de Pedro, lo asegura la persona que restauró la obra, la doctora BRAMBILLA.

Recordemos que Pedro odiaba a María Magdalena porque Jesús le hacía más caso a ella que a él. Probablemente por eso la Iglesia sigue sin admitir a la mujer en el sacerdocio.

Estoy convencido de que cada uno de los gestos de los apóstoles tiene un significado concreto que hay que descifrar.

jueves, 24 de junio de 2010

SOROLLA












Joaquín Sorolla y Bastida (Valencia, 27 de febrero de 1863 - Cercedilla, 10 de agosto de 1923 a los 60 años de edad), fue un pintor y artista gráfico español impresionista. Fue uno de los pintores españoles más prolíficos, con más de 2.200 obras catalogadas.

Cuando apenas contaba con 2 años de edad, fallecieron sus padres de una epidemia. Al quedar huérfanos, su hermana Eugenia y él, su tía Isabel, hermana de su madre, y su marido, de profesión cerrajero, los acogieron. Pasados los años intentaron enseñarle, en vano, el oficio de la cerrajería, advirtiendo pronto que su verdadera vocación era la pintura.

En 1874 empezó a estudiar en la Escuela Normal Superior donde le aconsejaron que también se matricularse en las clases nocturnas de dibujo en las Escuelas de Artesanos, en Valencia. En ésta última recibió, en 1879, una caja de pinturas y un diploma como premio «por su constante aplicación en el dibujo de figura». Ese mismo año, a la par que trabajaba en el taller de su tío, ingresó en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Carlos, en la que estudió junto a pintores como Manuel Matoses, Benlliure o Guadalajara.

Al acabar su formación, comenzó a enviar sus obras a concursos provinciales y exposiciones nacionales de bellas artes, como la de Madrid en mayo de 1881, donde presentó tres marinas valencianas que pasaron sin pena ni gloria pues no encajaban con la pintura oficial, de temática histórica y dramática. Al año siguiente, estudió la obra de Velázquez y otros autores en el Museo del Prado, etapa Realista, de la que era su profesor Gonzalo Salva. Por fin, en 1883, consiguió una medalla en la Exposición Regional de Valencia y, en 1884, alcanzó la gloria al conseguir la Medalla de Segunda Clase en la Exposición Nacional gracias a su obra Defensa del Parque de Artillería de Monteleón, obra melodramática y oscura hecha expresamente para la exposición; tal y como le dijo a un colega suyo: “Aquí, para darse a conocer y ganar medallas, hay que hacer muertos.”

Cosechó otro gran éxito en Valencia con su obra El crit del palleter sobre la Guerra de la Independencia. De esta manera, fue pensionado por la Diputación Provincial de Valencia para viajar a Roma donde, a la vez que trabajaba, conoció el arteclásico y renacentista, así como los grandes museos, contactando, además, con otros artistas.

Con su amigo el pintor Pedro Gil se desplazó a París durante el primer semestre de 1885, viviendo de cerca la pinturaimpresionista que produjo en él, ya de regreso en Roma, variaciones en su temática y estilo, llegando a pintar el cuadroreligioso El entierro de Cristo, con el que no tuvo el éxito esperado, donde se introduce en el Naturalismo y toma contacto con las vanguardias europeas, destacando las obras de los pintores John Singer Sargent, Giovanni Boldini y Anders Leonard Zorn.

En 1888 contrajo matrimonio con Clotilde García en Valencia, pero vivirían un año más en Italia, esta vez en la localidad de Asís. En 1889 se instalaron en Madrid y, en apenas cinco años, Sorolla alcanzó cierta fama y prestigio como pintor. En 1894 viajó de nuevo a París, donde desarrolló el luminismo, que sería característico de su obra a partir de ahora. Comenzó a pintar al aire libre, dominando con maestría la luz y combinándola con escenas cotidianas y paisajísticas de la vida mediterránea. En obras como La vuelta de la pesca, La playa de Valencia o Triste herencia, describió el sentimiento que producía la visión del mar Mediterráneo, comunicando el esplendor de una mañana de playa con un colorido vibrante y un estilo suelto y vigoroso. Con Triste herencia recibió, en 1900, el Grand Prix en el certamen internacional de París. Además siguió con supintura de denuncia social que tantos éxitos le había reportado en los últimos años con obras como Y aún dicen que el pescado es caro (1895).

Por aquel entonces, Valencia le nombró hijo predilecto y meritorio, y le fue dado su nombre a una calle. Tras muchos viajes por Europa, principalmente Inglaterra y Francia, celebró una exposición en París con más de medio millar de obras, que le dio un reconocimiento internacional inusitado, conociéndose su obra pictórica por toda Europay América. Expuso su obra en Nueva York en 1909 y cosechó un éxito sin precedente alguno, con obras como Sol de tarde o Nadadores, entre muchas otras. También lo hizo, en 1911, en el Museo de Arte de San Luis y en el Art Institute de Chicago.

En noviembre de ese mismo año, firmó un encargo para la Hispanic Society of Americapor el que realizaría catorce murales que decorarían las salas de la institución: se conocen como Visión de España. Con esta obra realizada entre 1913 y 1919, de tres metros y medio de alto por setenta metros de largo, alzó un imborrable monumento a España, pues en ella se representaban escenas características de diversas provincias tanto españolas como portuguesas. Necesitó de casi todo 1912 para viajar por todo el territorio, realizando bocetos y trabajos de costumbres y paisajes. De esta tarea destacan los óleos pintados en 1916 dedicados a niños y mujeres en las playas de Valencia, donde predomina la libertad de pincelada y la luz de su tierra. Algunos ejemplos son Madre e hija o Pescadora valenciana.

Otra importante faceta suya fue la de retratista, de figuras importantes como fueron Juan Ramón Jiménez, el rey Alfonso XIII, Vicente Blasco Ibáñez, Ortega y Gasset, etc.

También, en 1914, había sido nombrado académico y, cuando terminó los trabajos para la Hispanic Society, trabajó como profesor de composición y color en la Escuela de Bellas Artes de Madrid. Su pintura representó la aplicación directa del luminismo al paisaje y la figura, acercando por tanto esta tendencia a la sociedad de la época. Su principal discípulo, seguidor del luminismo, fue Teodoro Andreu.

En 1920, mientras pintaba el retrato de la señora Pérez de Ayala en el jardín de su casa en Madrid, padeció un ataque de hemiplejía que mermó drásticamente sus facultades físicas y mentales. Murió en su casa de Cercedilla el 10 de agosto de 1923.