sábado, 10 de agosto de 2024

LA ESPIRITUALIDAD Y EL NIVEL DE CONSCIENCIA

 



Precisamente a esa inquietud que algunos humanos tenemos por desarrollar nuestra consciencia para comprender no solo nuestro entorno cercano sino con aspiración a conocer el exterior, es a lo que llamamos ESPIRITUALIDAD.

La realidad es que los humanos somos una partícula del Creador por tanto tenemos su esencia pero nuestras capacidades reales y su extensión están por descubrir y de hecho solo algunos humanos son capaces de vislumbrar algo de esas posibilidades, pues el resto permanece anestesiado sin enterarse de nada.

De cualquier manera, lo que las religiones llaman espiritualidad, nada tiene que ver con los espíritus, salvo que como ellos es intangible, como lo es el programa que hace que nuestro organismo funcione de forma automática, como el programa que cada niño crea, con ayuda de los padres y otras personas, para aprender a andar y luego a correr, como el programa que creamos aprendiendo a hablar y a escribir, para que luego lo hagamos de manera automática. Así lo que las religiones llaman espiritualidad es un programa que desarrollamos mediante determinadas prácticas y técnicas, al cual llamo SUPERCONSCIENCIA.

Por más que nos empeñemos nada ni nadie puede entrar en conexión directa con el Creador del Universo si no, en todo caso, con alguno de los subprogramas que nos permitan obtener algo de lo que nosotros deseamos y ese es el plano en que se mueve el esoterismo practicado por chamanes, brujos, sacerdotes, profetas, iniciados esotéricos, etc. y en muchos casos solo se trata de percibir o visionar algo de los llamados Registros Akásicos que son como una gran memoria del planeta y del Universo. Al entrar en conexión con lo que podría ser nuestro propio programa individual, este entraría en conexión con los programas correspondientes a las personas o entidades que colaborarían para que nosotros podamos obtener lo que queremos conseguir y para ello debemos hacer cosas muy concretas lo que podríamos llamar técnicas o ritos, tomar las acciones pertinentes para conseguirlo y prepararnos a nivel mental y práctico para recibir nuestra petición y gestionarla. Si no hacemos todo esto de la manera adecuada nada conseguiremos.

Desarrollar el programa que las religiones y seguidores llaman espiritualización y que yo denomino SUPERCONSCIENCIA supone ser cada día más consciente de las realidades que nos rodean a todos los niveles y esto nos llevará a descubrir nuevas realidades de las que seremos conscientes de su existencia y solo a partir de ahí podremos comenzar a desarrollarlas, considerando que lo más importante es elevar nuestra consciencia y que el desarrollo de esas facultades especiales es solo la constatación de que vamos en el buen camino, considerando que debemos usarlas de manera responsable y en beneficio de la humanidad.

La espiritualidad es un concepto amplio y variado que puede tener diferentes significados dependiendo del contexto cultural, religioso y personal. En términos generales, la espiritualidad se refiere a una búsqueda personal de significado, propósito y conexión con algo más grande que uno mismo, que puede incluir lo divino, la naturaleza, el universo, o una realidad trascendental. A continuación, se detallan algunos aspectos clave de la espiritualidad, las técnicas para aumentarla y su relación con el nivel de consciencia.

Aspectos Clave de la Espiritualidad

  1. Búsqueda de Significado y Propósito: La espiritualidad implica una exploración profunda de las preguntas fundamentales de la vida, como el propósito de la existencia, el significado del sufrimiento y la naturaleza de la realidad.
  2. Conexión y Unidad: Muchas personas espirituales sienten una conexión con algo más grande que ellas mismas, ya sea un poder superior, la humanidad, la naturaleza o el universo en su totalidad. Esta sensación de unidad puede proporcionar un sentido de pertenencia y paz.
  3. Experiencia y Práctica Personal: La espiritualidad es a menudo una experiencia individual y subjetiva, y las prácticas pueden variar ampliamente entre personas. Estas prácticas pueden incluir la meditación, la oración, el yoga, la contemplación, el servicio a los demás, entre otros.
  4. Transformación Personal: La espiritualidad a menudo está relacionada con el crecimiento y desarrollo personal. Las personas espirituales tienden a buscar la autorreflexión, el autoconocimiento y la superación personal.

Técnicas para Aumentar la Espiritualidad

  1. Meditación: La meditación es una práctica clave en muchas tradiciones espirituales. Implica enfocar la mente y puede ayudar a aumentar la conciencia y la conexión espiritual. Hay diferentes tipos de meditación, como

Meditación mindfulness: técnica de meditación que busca entrenar la mente para centrar la atención y redireccionar los pensamientos

Meditación trascendental: Inhala de manera lenta y profunda y deja ir esos pensamientos que no te brindan cosas buenas. Repite varias veces hasta que vayas notando que tu mente se dirige a una relajación máxima.

Meditación guiada: creas imágenes mentales de lugares, objetos o personas para ayudarte a relajar.

Meditación merkaba: técnica de sanación que proviene del antiguo Egipto y puede ayudar a la mente, al cuerpo y al espíritu a sanarse, conectarse y vivir experiencias en otros planos de realidad.

  1. Oración: Para muchas personas, la oración es una forma de comunicarse con una entidad divina o con el universo. Puede ser una práctica formal o informal y puede incluir la gratitud, la solicitud de ayuda o la simple comunicación.
  2. Yoga: El yoga combina posturas físicas, respiración controlada y meditación. Es una práctica que puede ayudar a aumentar la conciencia corporal y espiritual.
  3. Journaling Espiritual: Escribir sobre pensamientos, emociones y experiencias espirituales puede ayudar a clarificar la mente y profundizar en la propia espiritualidad.
  4. Lectura de Textos Espirituales: Leer libros, textos sagrados y literatura inspiradora puede proporcionar nuevas perspectivas y profundizar la comprensión espiritual.
  5. Servicio a los Demás: El voluntariado y ayudar a los demás pueden ser formas poderosas de conectarse con una realidad más amplia y desarrollar un sentido de propósito y compasión.
  6. Tiempo en la Naturaleza: Pasar tiempo en la naturaleza puede ser una forma de conectarse con el mundo natural y encontrar una sensación de paz y maravilla.

 

Relación entre Espiritualidad y Nivel de Consciencia

La espiritualidad y el nivel de consciencia están estrechamente relacionados. Un mayor nivel de consciencia implica una mayor capacidad de estar presente y consciente de uno mismo y del entorno. Esta mayor consciencia puede llevar a una percepción más profunda de la realidad y a una conexión más fuerte con aspectos espirituales.

  1. Consciencia Plena (Mindfulness): Practicar mindfulness puede aumentar la consciencia del momento presente, lo que puede profundizar las experiencias espirituales y aumentar la conexión con lo trascendental.
  2. Autorreflexión: A medida que las personas se vuelven más conscientes de sus pensamientos, emociones y comportamientos, pueden experimentar un mayor crecimiento espiritual.
  3. Experiencias Trascendentales: Las prácticas espirituales a menudo buscan experiencias trascendentales que elevan el nivel de consciencia y proporcionan una sensación de unidad con el universo.
  4. Desarrollo Ético y Moral: Un mayor nivel de consciencia a menudo lleva a una mayor preocupación por el bienestar de los demás y un comportamiento más ético y compasivo.

En resumen, la Espiritualidad o Superconsciencia, es una búsqueda profunda y personal de significado, propósito y conexión con una realidad mayor. A través de diversas prácticas y técnicas, las personas pueden aumentar su CONSCIENCIA,  lo que lleva a una vida más plena y significativa que proporciona EQUILIBRIO MENTAL y PAZ.

viernes, 9 de agosto de 2024

LA SINFONÍA DE LA SUPRAORQUESTA DEL UNIVERSO

 


LA SINFONÍA DE LA SUPRAORQUESTA DEL UNIVERSO

En la vida que nosotros podemos percibir, comprender y experimentar, las vibraciones sonoras se producen de las siguientes formas:

Percusión: El instrumento es golpeado con una herramienta de cuayas resultas el instrumento vibra y produce un sonido de una frecuencia determinada. Sea un tambor, timbal, xilófono, etc. las cuerdas del piano.

Pulsación: Las cuerdas del instrumento se pulsan y al soltarlas vibran. Tales como guitarra, arpa, mandolina, bandurria,  etc.

Aire: Una lengüeta vibra al pasar el aire al soplar el músico en instrumentos como trompeta, corneta, saxofón, etc. El aire también hace vibrar las copas de los árboles o los hilos y cables del tendido eléctrico, así como el ruido al cerrase puerta y ventanas por su fuerza.

Rozamiento: Las cuerdas del instrumenta se las hace sonar mediante una cuerda tensa en un arco como el violín, violonchelo…que roza sobre las cuerdas del instrumento.

Eléctrico: Los truenos, chispazos entre los cables de la red eléctrica, ruidos de motores eléctricos y otros dispositivos.

Electrónico: Mediante electrónica se crean circuitos que oscilan a diferentes frecuencias y formas de onda que al final se escuchan por altavoces tal como en órgano o sintetizadores, guitarras eléctricas, mecanismos de ultrasonidos anti-insectos, etc.

Dadas las limitaciones de nuestros sentidos, hay canales o gamas de frecuencias que nosotros no podemos percibir pero sin embargo esas vibraciones se producen y así sucede que nuestro propio cuerpo, nuestros órganos, nuestro cerebro, producen una gran variedad de vibraciones a diferentes frecuencias de las que no somos conscientes, salvo algunas personas que si son capaces de percibir algunas de ellas. Personalmente escucho de una forma constante, aunque mejor las escucho en silencio ambiental, una serie de frecuencias altas en la gama de los ultrasonidos que sin duda son producidas por mi cerebro.                              

Un programa informático digital y la información necesaria para hacer funcionar determinados dispositivos como un ordenador, al final se graba en un disco duro o un circuito integrado en sistema binario. Todo se reduce a unos y ceros organizados de una determinada manera que no son detectables salvo con detectores o lectores especiales y con un software o programa informático.

De igual manera, el Universo, sus programas e información, se graban en el tipo de cuerdas y frecuencias a que vibran las diversas partículas elementales pero que hasta la fecha no hemos sido capaces de construir el aparato que nos permita detectarlas.

Las partículas que aparecen en la Tabla de partículas elementales son las «letras» de todo tipo de materia y parece que  no tienen otras subestructuras internas. Sin embargo, la teoría de cuerdas afirma una cosa bien diferente. Según esta teoría, si pudiéramos examinar estas partículas con un microscopio electrónico, a un nivel de aumentos mucho mayor del posible hoy—una precisión que estuviera en muchos grados de magnitud más allá de nuestra capacidad tecnológica actual— descubriríamos que ninguna es como un punto, sino que cada una de ellas está formada por un diminuto bucle unidimensional. Cada partícula contiene un filamento que vibra, oscila y baila como un elástico de goma infinitamente delgado que los físicos han denominado cuerda.

Es cierto que en la física moderna, la teoría cuántica y la mecánica cuántica en particular, nos enseñan que todo en el universo está compuesto por partículas subatómicas que vibran constantemente. Por lo tanto, es posible decir que todo en el universo está en constante movimiento vibratorio, lo que podríamos expresar como un infinito número de instrumentos formando una supraorquesta que suena de manera armónica desde toda la eternidad

En términos de la filosofía budista y la tradición de los lamas del Tíbet, la idea de que todo en el universo es vibración también se refiere a la noción de que todo está interconectado y que todos somos uno. Según esta perspectiva, la vibración de una cosa afecta a las vibraciones de todo lo demás, y por lo tanto, todo en el universo está en constante resonancia y armonía, por lo cual, cuando algo “suena mal” su efecto repercute en todo el Universo aunque sea a muy pequeña escala, pero en lo cercano su influencia es mayor.

En resumen, la idea de que todo en el universo es vibración puede ser vista como una interpretación científica y también una perspectiva filosófica y espiritual que nos invita a reflexionar sobre la interconexión de todas las cosas en el Universo.

Por lo tanto, según la “teoría de cuerdas”, la vibración de las cuerdas es el factor principal que determina las propiedades de las partículas. Sin embargo, también hay otros factores que pueden influir, como el espacio-tiempo en el que se encuentran las cuerdas, las interacciones con partículas y las condiciones en el universo temprano.

En síntesis el Universo es una ultraorquesta que interpreta sin parar infinidad de sinfonías de las que no somos conscientes pero suenan.