TOMAR CONCIENCIA

 

Cuando la mayoría de la población tome conciencia de que están haciendo realmente los que nos dirigen, entonces empezaremos a cambiar el sistema.

No hay dinero para nosotros:

-No hay dinero para nuestras pensiones, pues si suben las pensiones el país se va a la ruina. Por ello no querían ligarlas al IPC.

-No hay dinero para los salarios, pues si estos suben las empresas tienen que cerrar.

-No hay dinero para la sanidad, pues si gastamos más el país se endeuda y por ello se subcontrata a la medicina privada.

-No hay dinero para la enseñanza estatal, por las mismas razones y por ello se subvenciona la enseñanza privada.

Todo lo quieren privatizar para multiplicar los ricos sus ganancias. Lo cierto es que los ricos y poderosos lo son a costa del Estado o más bien de sus arcas y

¿Quiénes llenan las arcas del Estado? Nosotros, los de abajo.

¿Quiénes vacían las arcas? Ellos, los de arriba.

Lo que está claro es que ciertos políticos y ciertos empresarios nos han robado todo lo que han podido por lo que no queda dinero suficiente. A veces de manera tan sutil como que el Banco Central Europeo cedió mucho dinero a los Bancos Españoles al 1 % para que compraran deuda al Estado al 7 %. ¿No debería haber comprado deuda directamente el Banco Central Europeo?

-La realidad es que nos enseñan y adoctrinan para que hagamos lo que ellos necesitan utilizar de nosotros y seguir manipulándonos.

-Nos dan la sanidad que pagamos de nuestras nóminas, pues nos necesitan sanos, pero ponen muchas pegas cuando mantenernos sanos cuesta caro, aunque lo pagamos entre todos nosotros. Además del gran negocio que hacen con las medicinas.

-No hay dinero para aumentar salarios de los trabajadores pero si pueden pagar el de los jefes y dirigentes que es 10, 20, 30... veces superior.

-No se pueden subir las pensiones pero ellos tienen, aparte de lo que roban y los altos salarios que cobran, unos planes de pensiones que se los pagamos nosotros, pues lo que ellos ganan es gracias a nuestro trabajo, pues ellos no producen, solo dirigen.

Desde los sumerios unos pocos ostentan el poder y son muy ricos a costa del resto de la humanidad, los pobres que somos los esclavos. Nosotros creamos la riqueza que ellos disfrutan. Es como los campos de algodón en el siglo XIX que defendían los confederados norteamericanos.

Entonces, cuando los sumerios, fue creado el orden social piramidal. En la cúspide estaban los dioses y más abajo el clero que servía de intermediario entre los dioses y los reyes, estos últimos eran quienes daban las órdenes y vigilaban a la humanidad.

La humanidad era la única que trabajaba para dar de comer a todos, especialmente a ellos que se quedaban con la mejor parte, y además construir casas y carreteras, hacer vestidos y todos los utensilios que se necesitaran. Algunos de los humanos especialmente avispados podían aspirar a ser los jefes inmediatos de los humanos, aunque ellos también eran esclavos pero con algunos privilegios.

¿Habéis notado algún cambio respecto a este orden? No, desde entonces se mantiene el mismo orden social.

Por eso los reyes se consideran descendientes de los dioses y los que no son reyes, escriben en las monedas párrafos como Francisco Franco Caudillo de España por la Gracia de Dios. Dicho en lenguaje sencillo y claro: NOS TOMAN POR GILIPOLLAS.

Cuando gobierna la derecha ya sabemos a favor de quien gobierna, de su familia, de sus amigos, de los ricos.

Cuando gobierna la supuesta izquierda lo hace en favor siempre de la derecha y actúa como tal. Los políticos ceden el poder al dinero y hacen lo que decide el capital, hasta las leyes se hacen en favor de ellos, salvo algunas que luego les cuesta cumplir o para las que no hay presupuesto.

Si lo vemos con claridad, no hay derechas ni izquierdas, todos somos de derechas pues todos queremos ser millonarios.

Hasta la Revolución Industrial del siglo XIX la enseñanza solo existía para los ricos, para los poderosos y sus familias, aunque no todos se molestaban en aprender a leer y escribir pues muchos reyes fueron analfabetos, así que imaginad el resto. La industria les obligó a darnos una cierta formación y así nació el Sistema de Enseñanza Nacional, pero nos enseñan justo lo necesario para trabajar, no nos enseñan a vivir, eso lo dejan para ellos.

El Sistema de Educación crea productores y consumidores adoctrinados, no nos enseña a ser libres porque no nos enseñan a pensar con criterio propio sino todo lo contrario. Nos adoctrinan para que sigamos siendo sus esclavos, nos hablan de competir entre nosotros, nos hablan de innovar para que las máquinas nos sustituyan, nos hablan de desarrollo para que trabajemos con mayor eficacia y produzcamos más.

El dinero y el poder actúan como si fuesen a ser eternos cuando todos sabemos que la existencia es corta y que al morir nada te puedes llevar pero se lo transmiten a su familia y amigos para que sigan manteniendo el estatus quo.

La única forma de luchar contra esta esclavitud es adquiriendo la máxima formación humana posible, que no técnica, tomando conciencia de clase y llevando a la humanidad a la unidad e igualdad. Nada de luchas entre nosotros, nada de guerras para ayudarles a ser más poderosos a costa de otros humanos. Entre nosotros solo cabe la ayuda y la cooperación.

A nosotros ya nos formaron a su antojo, mal para nosotros y bien para ellos, ahora les toca a nuestros jóvenes que deberían estar aquí, pues gran parte de nuestra lucha a quienes beneficia es a ellos.

Debemos aprender a vivir, no a competir. La competición entre nosotros solo le favorece a ellos, por eso ponen tanto énfasis en los deportes y sus competiciones, pues es una forma sutil de impregnarnos de su necesidad.

La vida consiste en cubrir nuestras necesidades primarias, secundarias y terciarias.

Primarias: alimentación, salud, vestido.

Secundarias: formación, cultura.

Terciarias: formación psíquica/espiritual y artística.

Observad que la mayoría de la población solo se preocupa de satisfacer sus necesidades primarias y muchísimos ni siquiera lo consiguen, pues mientras estas no estén satisfechas no pueden pensar en las otras.

Nuestro sistema nos asigna el papel del gusano que siempre se arrastra para moverse, pero nosotros hemos de aprender del gusano de seda que crea su crisálida y de ella sale convertido en mariposa para poder volar.

El 'topless' de Amaral

 

Podemos ver que en muchas tribus africanas las mujeres van a pecho descubierto y no pasa nada. Si lees “Sinuhé El Egipcio” novela de Mika Waltari te enteras de que, en la época de los faraones, las mujeres que tenían un bello pecho también lo lucían de manera visible.

En otras épocas y en otros lugares, ha sido y es normal que las mujeres puedan ir mostrando su pecho sin que nadie se llame a escándalo, entonces ¿por qué se organiza tanto revuelo cuando en el llamado “mundo occidental” una mujer se atreve a mostrar su pecho?

Todos recordamos, en España, aquellos años llamados del “destape”, en que en el cine se podían ver escenas en que alguna mujer mostraba su pecho, e incluso se veía algún desnudo integral. Aquello fue una revolución y muchísima gente iba a ver la película solo por disfrutar de la visión del desnudo femenino, como si nadie antes hubiera visto a una mujer desnuda, fuese hombre o mujer el observador.

Curiosamente, ver a un hombre con su tórax al descubierto, sea en la playa, piscinas e incluso por la calle, en determinadas circunstancias, a nadie le llama la atención. ¿Por qué esa diferencia de aceptación? Aparte del volumen ¿Qué diferencia un pecho masculino de uno femenino?

Los occidentales despotricamos de los musulmanes por su empeño de llevar a sus mujeres cubiertas de ropa desde los pies hasta el cuello, y que además lleven un pañuelo que les cubre el cabello, y sin embargo nos escandalizamos de que una mujer occidental muestre su pecho. Incluso algunos son tan puritanos-retrógados que les escandaliza ver a una madre dar de mamar a su bebé en público. ¿De qué tiene que avergonzarse una madre de alimentar a su bebé? ¿Tenemos los occidentales reminiscencias de un posible pasado talibán?

También hemos de considerar que dependiendo en que zonas de nuestro planeta, las partes del cuerpo femenino más sexualizadas no son el pecho, sino que pueden ser los pies, las orejas, el cuello, los glúteos…así, para que ciertos hombres no se vean excitados de manera irresistible por esas mujeres ¿deben bañarse con un burca y con botas?

Parece que se nos olvida que aproximadamente, en nuestro mundo, las mujeres son la mitad de la población mundial. En unos lugares habrá un porcentaje algo superior de mujeres y en otros un porcentaje superior de hombres, pero las diferencias son mínimas. Entonces ¿por qué las mujeres deben actuar según queramos los hombres? ¿Por qué no podría ser al revés? ¿Por qué los hombres consideramos que las mujeres nos provocan cuando enseñan ciertas partes de su cuerpo y sin embargo no aplicamos el mismo criterio cuando somos los hombres los que mostramos esas mismas partes, como el pecho? Al final, aunque presumamos de que somos cristianos, resulta que todos somos moros. ¿Y por qué los cristianos y sus derivados, parecen manifestar tanta animadversión a todo lo relacionado con la sexualidad, cuando una parte del clero resulta ser depredadora sexual? ¿No es una contradicción que la Iglesia predique lo que ella no cumple?

Yo puedo entender que en la Judea o Palestina de hace dos mil años, donde la costumbre, tanto en hombres como en mujeres, era vestir una túnica que cubría desde el cuello hasta los pies, podría resultar extraño y chocante que alguien fuera mostrando alguna parte de su cuerpo, aunque los pescadores parece que se subían la túnica para no mojarla. Pero ahora, en pleno siglo XXI que alguien se escandalice por destapar más o menos ciertas partes del cuerpo, creo que es exagerar.

Por esto considero que el hecho de que una cantante como Amaral, tenga que mostrar su pecho al desnudo para reivindicar sus derechos y su libertad como mujer, y reclamar su igualdad con los hombres, no solo estoy de acuerdo con ella con su protesta, sino que lo que me sorprende es que el simple hecho de mostrar el pecho tenga tanto impacto social y tanta repercusión en la prensa.

Pienso que algunos deberían dejar de escandalizarse y de darse golpes de pecho, comenzando a lavar sus mentes, a “purificarlas”, para ver con otra mirada más limpia la belleza del cuerpo humano, sea masculino o femenino.

No quiero hacer comentarios de la misoginia y la gilipollez de las redes como Facebook, Instagram, twiter y otras que no tienen inconveniente en ver fotografías de barbaridades de guerra o descuartizamientos salvajes, pero ponen en marcha su censura y castigo a las fotos en que una mujer muestra sus pezones. Tiene "cohones".