domingo, 25 de agosto de 2013

EL DIBUJO EN EL ARTE: LA LÍNEA

Aunque actualmente hay muchos artistas que no hacen uso del dibujo, bien porque superponen objetos en el soporte (y por tanto no tienen nada que dibujar) o porque directamente emborronan con manchas el lienzo, papel o tabla (sin más y poco a poco van apareciendo las formas), al final se percibirán unos contornos que delimitan o separan unas formas de otras en el cuadro. Esto es el dibujo.
El dibujo, como cualquier acción que el ser humano realiza para conseguir un objetivo con seguridad, exige una técnica, siempre que se quiera dominar la situación. Por tanto, se necesita un tiempo de aprendizaje para conseguir dibujar lo que uno quiere y como uno quiere, y no ir a lo que salga.
Atendiendo al material e instrumento utilizado para resolver el dibujo, se puede dibujar con carbón, lápiz, sanguina, grisalla, pincel, pluma, rotulador, tiza o bien con la pintura y color directamente. También se puede hacer con un estilete como en los grabados, rompiendo la capa de parafina, con el mango del pincel o un palillo, como en las ceras, si se da un color base. Cada artista encuentra la forma y manera que mejor va con él y, si no encuentra ninguna adecuada, la inventa.
Normalmente, antes de comenzar a pintar un cuadro, es necesario definir lo que se va a pintar y cómo va a hacerse: de qué elementos se compondrá y cómo se van a colocar. Todo ello se suele resolver mediante dibujos previos de los elementos por separado y en conjunto.
En el dibujo estudiaremos sus diferentes aspectos: la línea, el contorno, el tono y la perspectiva. En este artículo trataremos sobre la línea.

1. La línea no es otra cosa que una raya marcada de algún modo sobre una superficie.

2. La línea divide, delimita o separa un área o espacio y define una forma gracias al borde o contorno.

3. Con la línea creamos un dibujo o estructuramos una composición, resolvemos símbolos o ideas y producimos gradaciones tonales. La línea por sí sola puede mostrar emociones y sensaciones.

4. La línea recta expresa estabilidad, vigor, seguridad y tiene cualidad masculina.

5. La curva expresa voluptuosidad, indecisión. Tiene cualidad femenina.

6. Expresa energía cuando es muy cerrada.

7. Movimiento e intranquilidad al ser irregular.

8. La línea vertical es la más estable digna y fuerte.

9. La horizontal es la más sólida y reposada.

10. La recta inclinada es activa, excitada y aumenta esa sensación a medida que es más inclinada Si es excesiva la inclinación dará la sensación de desplome, caída o desequilibrio.

11. La línea rota y en múltiples direcciones expresa confusión, discordia.

12. La base de toda creación pictórica reside en la combinación de las formas lineales y en la subdivisión de áreas y contornos.

13. Por la línea se definen puntos focales o de mayor interés en el dibujo.

14. Caminos para la vista.

15. Motivos para atraer la atención.

De lo visto anteriormente creo que queda claro que una línea, una simple raya, es un lenguaje, un medio de comunicación. Con ella podemos transmitir mensajes, sentimientos y emociones. En las figuras 12, 13, 14 y 15, vemos que la línea es capaz de delimitar y definir las formas mediante el dibujo del contorno de las mismas y de esto va, precisamente, el artículo de la semana que viene.