Continúa la narrativa del diluvio:
11 A
los seiscientos años de la vida de Noé, el segundo mes, el día diecisiete de
él, se rompieron todas las fuentes del abismo, se abrieron las cataratas del
cielo,
12 y
estuvo lloviendo sobre la tierra durante cuarenta días y cuarenta noches.
No debemos tomarnos al pie de la letra los números o
cantidades que aparecen en la Biblia pues veréis repetidas siempre las mismas
cifras 3, 4,7,10,12, 15 y 40. Rara vez aparecen otras como 5 ó 6, 24, 36, 48… Estos
números tienen más que ver con la Cábala que con la realidad.
Esto ha tenido tanta repercusión como que los colores del
arco iris nos han inculcado que son 7 cuando no es verdad, son infinitos en un
todo continuo de mezclas, con diferentes proporciones de los colores primarios
rojo, amarillo y azul. Por tanto aparte de ver los primarios vemos también los
secundarios naranja, verde y violeta, pero no son siete sino seis.
13 Aquel
mismo día entraron en el arca Noé y sus hijos, Sem, Cam y Jafet; su mujer y las
mujeres de sus tres hijos,'
14 y
las fieras todas según su especie; todos los ganados según su especie; todo
reptil que se arrastra sobre la tierra, según su especie; toda ave, según su
especie; todo pájaro, toda especie de volátil.'
15 Entraron
con Noé en el arca, de dos en dos, de toda carne que tiene hálito de vida.
16 De
toda carne entraron macho y hembra, como lo había mandado Dios, y tras él cerró
Yahvé.
Claro está los
animales iban en parejas, espermatozoos y óvulos, aunque también iban huevos
empollados. Animales vivos los justos para comer los navegantes.
17 Diluvio
durante cuarenta días sobre la tierra, crecieron las aguas y levantaron el
arca, que se alzó sobre la tierra.
18 Siguieron
creciendo, creciendo, las aguas sobre la tierra, y el arca flotaba sobre la
superficie de las aguas.
19 Tanto
crecieron las aguas, que cubrieron todos los altos montes de debajo del cielo.
20 Quince
dedos subieron las aguas por encima de ellos.
Un dedo era equivalente a 2 a 2,4 centímetros, por tanto de
30 a 36 cm cubrían las aguas los picos más altos.
A estos hechos, esto dicen los textos sumerios:
Después de que la inmensa ola barriera la
Tierra se abrieron la compuertas del cielo y se desató un aguacero desde los
cielos a la Tierra, durante siete días se mezclaron las aguas de arriba con las
del Gran Abajo, cesando luego la muralla de agua, pero las lluvias continuaron
durante cuarenta días y noches más. Las cimas de las altas montañas eran como
islas y el resto un inmenso mar. Cuando las lluvias se detuvieron Ziusudra
abrió la portezuela de la embarcación para inspeccionar los alrededores. Era un
día luminoso y soplaba una suave brisa. La embarcación cabeceaba sobre un vasto
mar.
Por tanto, según los textos sumerios, la causa del Diluvio fue el efecto
gravitacional provocado por su planeta Nibiru que rompió los hielos del polo
Sur y al chocar los iceberg entre si y lanzarse sobre el mar provocaron enormes
tsunamis. A su vez llenó el cielo de densas nubes que al condensarse cayó toda
el agua acumulada sobre la Tierra
21 Pereció
toda carne que se mueve sobre la tierra, aves, ganados, bestias, y todos los
reptiles que se arrastran por la tierra, todos los hombres,
22 y
todo cuanto vivía sobre la tierra seca.
23 Fueron
exterminados todos los vivientes sobre la superficie de la tierra, desde el
hombre a la bestia, y los reptiles y las aves del cielo, quedando sólo Noé y
los que con él estaban en el arca.
Esta afirmación de que pereció absolutamente todo tampoco es
verdad absoluta, pues en algunos lugares algunos humanos y animales
sobrevivieron subiéndose a las cumbres a las que no llegó el agua,
especialmente en Mesoamérica donde estaba Caín y su descendencia, según cuentan
también los textos sumerios. Por eso los indígenas son barbilampiños, tal como
lo fue Caín por orden de Yahveh.
24 Ciento
cincuenta días estuvieron altas las aguas sobre la tierra.
Como podéis imaginar esta cifra también es relativa pues no
sabemos que podían considerar aguas altas. En cualquier caso, el barrizal tuvo
que durar lo suyo después de 5 meses todo sumergido.