domingo, 27 de enero de 2008

MONET Y SU OBRA

Este análisis, correspondiente a esta obra de Monet, es solo uno de los 26 realizados por mi con motivo de un curso que hicimos como ejercicio en la UNED en el curso de "Experto en e-learning"donde aplico mis conocimientos como pintor. Este análisis puede hacerse más exhaustivo y con gráficos que clarifiquen lo expuesto, como pueden ver gratuitamente en el curso que diseñé para Academia de Arte y Cartelera llamado LOS IMPRESIONISTAS donde se aplican las técnicas de otro de mis cursos llamado CONTEMPLANDO UN CUADRO. Este último lo recomiendo a todos los amantes del Arte y que no posean conocimientos técnicos específicos, pues les ayudará a disfrutar con más intensidad.



EL ESTANQUE DE LOS NENÚFARES EN ROSA 89,5x100 1900 Museo de Orsay
Esta obra es semejante a otras realizadas sobre el mismo tema y lo más destacable es la armonía de colores jugando con los complementarios, para conseguir una vibración del color y aunque la materia pictórica es densa la pincelada es fina y desordenada.


Aquí los colores dominantes son los amarillos y naranjas con los violeta rojizos, porque rosa propiamente dicho no son. También destacan los blancos especialmente en el puente, así como los azules.

La pincelada parece caprichosa y es suelta y empastada, mezclando y superponiendo todos los colores antedichos por todo el cuadro.

Aunque el motivo es exactamente el mismo de otra anterior, esta está tomada un poco desplazada a la izquierda y algo más cerca. Así nos aparece a la izquierda una zona amarilla dorada y abajo en la esquina una zona verde que estructuran dos semicírculos los cuales están relacionados, por la forma, con las copas de los árboles de la esquina opuesta. Como ya sabemos estas curvas producen un movimiento rítmico suave y elegante y tienen carácter femenino, que se repite, aunque de forma más abierta en las curvas del puente, pero el mismo puente equilibra estas curvas con sus líneas verticales que dan fuerza y permanencia a la composición. Las franjas horizontales de los nenúfares dan paz y quietud.

La pincelada misma produce aquí fuertes ritmos: en la zona izquierda superior los trazos son verticales, en cambio, tirando hacia abajo, los trazos son curvos pero todos con la misma tendencia, pero más abajo vemos en verdes trazos “desordenados” en todas las direcciones. Los nenúfares en el agua con su miríada de toques blancos, azules, verdes, violetas… las curvas del puente y barandillas que atraviesan el cuadro…Todo son ecos que producen maravillosas resonancias.