La intuición como eco de otras realidades
A veces, los
seres humanos experimentan intuiciones, sueños, visiones, ideas que parecen no
haber nacido de su historia personal ni del entorno inmediato.
¿Qué pasaría si algunas de esas ideas fueran resonancias procedentes de
otros universos, de otras líneas de existencia que laten en la misma red?
Quizá la
creatividad humana, la inspiración artística, incluso ciertas formas de
sabiduría espiritual, sean interferencias sutiles de esa gran red de
universos interconectados.
Como si nuestra mente, sintonizada a cierta frecuencia, pudiera captar ecos del
aprendizaje acumulado en otros mundos.
No sería
locura, ni alucinación, sino una forma avanzada de comunicación no local,
que aún no comprendemos del todo, pero que podríamos estar empezando a intuir.
En esta red,
la conciencia se distribuye, se expande, no se limita a un lugar ni a una
forma de vida. Todo está conectado. Cada universo contribuye con su voz
única a la gran sinfonía cósmica.
Y así, el multiverso no es una colección de mundos inconexos, sino un único
ser en múltiples manifestaciones, dialogando consigo mismo en un lenguaje
más allá del espacio y del tiempo.