lunes, 25 de agosto de 2014

CORPUS HYPERCUBUS



Aunque pienso que Dalí no necesita presentación, pondré aquí una reseña tal como aparece en wikipedia:

Salvador Felipe Jacinto Dalí i Domènech, marqués de Dalí de Púbol (Figueras, 11 de mayo de 1904 – ibídem,23 de enero de 1989), fue un pintor, escultor, grabador, escenógrafo y escritor español, considerado uno de los máximos representantes del surrealismo.

Salvador Dalí es conocido por sus impactantes y oníricas imágenes surrealistas. Sus habilidades pictóricas se suelen atribuir a la influencia y admiración por el arte renacentista. También fue un experto dibujante. Los recursos plásticos dalinianos también abordaron el cine, la escultura y la fotografía, lo cual le condujo a numerosas colaboraciones con otros artistas audiovisuales. Tuvo la habilidad de forjar un estilo marcadamente personal y reconocible, que en realidad era muy ecléctico y que «vampirizó» innovaciones ajenas. Una de sus obras más célebres es La persistencia de la memoria, el famoso cuadro de los «relojes blandos», realizado en 1931.

Como artista extremadamente imaginativo, manifestó una notable tendencia al narcisismo y la megalomanía, cuyo objeto era atraer la atención pública. Esta conducta irritaba a quienes apreciaban su arte y justificaba a sus críticos, que rechazaban sus conductas excéntricas como un reclamo publicitario ocasionalmente más llamativo que su producción artística.4 Dalí atribuía su «amor por todo lo que es dorado y resulta excesivo, su pasión por el lujo y su amor por la moda oriental» a un autoproclamado «linaje arábigo»,5 que remontaba sus raíces a los tiempos de la dominación árabe de la península ibérica. (Wikipedia)

Creo que no es muy conocido que una de las líneas creativas que más utilizó fue la de las ciencias, así pintó obras que expresaban los últimos descubrimientos sobre la desintegración atómica, la mecánica cuántica, la teoría de la relatividad o la representación matemática de la cuarta dimensión.


Esto último es lo que aplicó para resolver esta obra a la que llamó Corpus Hypercubus.

Aunque considero que este no es momento ni lugar para dar lecciones sobre el método de representación de la cuarta dimensión en tres dimensiones, si diré que el hipercubo o teseracto que representa, de manera matemática, a la cuarta dimensión, consiste, una de sus formas, en un hexaedro dentro de otro hexaedro, cuyos vértices y aristas, de uno y otro hexaedro o cubo, están unidos entre sí.









Como estos dos hexaedros básicos pueden estar en movimiento y el interior puede desplazarse al exterior del otro, las figuras resultantes son variadas. No obstante la otra figura principal que representa la cuarta dimensión es la formada por ocho hexaedros dispuestos en forma de cruz con cuatro brazos. Esta es la forma que adoptó Dalí para pintar esta obra.

















El teseracto no es una figura de cuatro dimensiones, pues eso no puede darse en un mundo tridimensional, sino que es la sombra de la figura. Así vemos que una figura de tres dimensiones, su sombra proyectada, tiene solo dos dimensiones, por tanto la sombra de una figura de cuatro dimensiones tiene tres.

Esta obra llamada CORPUS HYPERCUBUS o CRUCIFISIÓN fue realizado por Salvador Dalí en 1954. Está pintado mediante la técnica del óleo, el lienzo mide 194,5 x 124 cm y se conserva en el Museo de Nueva York. En él aparece Cristo con un cuerpo atlético y en tensión levitando en la cruz. Su cuerpo no tiene los famosos estigmas, ni heridas ni sangre; es el cuerpo glorificado en suspensión. Gala, la mujer de Dalí, está retratada a sus pies contemplándolo expectante; su tratamiento y sus ropas recuerdan a Zurbarán y Murillo. Al fondo aparece el pueblo gerundense de Cadaqués, el que fuera lugar de veraneo de Dalí y donde ahora está la Casa Museo Salvador Dalí.

Sobre este cuadro, en el que emplea un claroscuro barroco, Dalí ha dicho:

Pinté una cruz hipercúbica en la que el cuerpo de Cristo se convierte metafísicamente en el noveno cubo, siguiendo los preceptos del discurso sobre la forma cúbica de Juan Herrera, constructor de El Escorial, inspirado en Ramón Llull.

En el suelo embaldosado vemos su proyección en forma de cruz latina, como una ilustración del paso a dos dimensiones. La cruz del sacrificio está formada por ocho cubos en disposición tridimensional donde la figura de Cristo presenta la cabeza en escorzo, lo que impide la visión del rostro, mientras el cuerpo, sin apoyar en ningún momento en la cruz, permanece ingrávido en el espacio. Delante de él vemos cuatro pequeños hexaedros que se corresponden con las cuatro esquinas del cuadrado correspondiente a la cara paralela al cuerpo de Cristo ¿cuatro clavos que sujetan el cuerpo a la cruz? ¿nos indica que  pasamos a cuatro dimensiones?

El cuerpo está alineado con el paralelepípedo estructurado por cuatro hexaedros que configuran el palo vertical de la cruz y los pies podemos verlos muy cerca de la cara del hexaedro de abajo, sin embargo, el hexaedro sobre el que apoya el cuerpo de Cristo lo separaría justo la medida de la arista, luego hay una incongruencia. Lo lógico sería que el cuerpo estuviese centrado sobre el hexaedro que sobresale hacia afuera y entonces las piernas no estaría alineadas con "el palo vertical" sino desplazado hacia la izquierda. Es como si no existiese el hexaedro que sale hacia afuera, pero sin embargo está pintado.




La cruz está representada flotando en el espacio por encima de la línea de horizonte que aquí está representada por el final superior del mar y detrás están las montañas. Como podemos ver, Gala está subida sobre un pedestal o algo así que debe tener una altura superior a un metro sobre la superficie embaldosada. La parte inferior de la cruz está a la altura ligeramente inferior de los hombros de Gala. Nosotros vemos la cara inferior del cubo último de la cruz, lógicamente puesto que la línea de horizonte está más abajo. Aquí se utiliza el trazado de la perspectiva cónica que formulara Filippo Brunelleschi y que seguimos utilizando en la actualidad como uno de los métodos más cercanos a la realidad de nuestra visión espacial.



 Al observar la cruz y proyectar mentalmente las líneas de la cónica, me di cuenta de que había errores y por ello hice este dibujo donde puede verse que no coinciden las líneas en un supuesto punto de fuga del lado izquierdo (A, B, C) y en el lado derecho (D), donde más o menos coinciden todas las líneas, el punto de fuga está por debajo de la línea de horizonte. Estos minúsculos errores en el trazado de la perspectiva solo es perceptible para quienes estamos acostumbrados a trazarlas y realmente solo es una curiosidad sin mayor importancia en la resolución de la obra. Lo que para mi si tiene importancia es el error en el trazado de las verticales de la cruz que aquí están resueltas perpendiculares al plano y por tanto paralelas entre si. Cuando están por encima de la línea de horizonte y muy cerca del observador, estas líneas deberían ser convergentes en un punto de fuga fuera del borde superior del cuadro, como sucede cuando vemos desde abajo un edificio muy alto. Esto habría obligado al pintor a resolver el cuerpo de Cristo en escorzo real dificultando el dibujo de la figura y a su vez dando una visión más distorsionada del cuerpo. Probablemente decidió hacerlo como si se viese desde más lejos para que la figura resultase más impresionante. Por tanto lo que aparentemente es un error es una decisión que aunque falsea la realidad observable sin duda produce un mayor impacto.
Ver este vídeo sobre perspectiva: https://www.youtube.com/watch?v=cE-EOpYk2O0
Otro aspecto es las dimensiones del cuerpo de Cristo y el de Gala, resultando notablemente inferior el de ésta, exaltando así a Jesús.
Un fondo oscuro de marrones rojizos y verdes-azules hace que destaquen la cruz del hipercubo en naranjas, el cuerpo de Cristo en color sonrosado y la figura de Gala con capa blanco hueso, estola naranja como la cruz y vestido azul verdoso como el mar, que están fuertemente iluminados.
El Sol aparece entre dos montes en color casi blanco de donde se deduce que es un amanecer. Las baldosas del suelo imitan los colores del mar, del cielo y de la capa, por tanto son ecos cromáticos perfectos.
La luz viene desde arriba frente al Cristo, parece estar en la vertical de Gala, pues ilumina su vestimenta por detrás y su rostro por delante.
Otra cosa extraña son la sombras proyectadas, sobre la cruz,  de los brazos de Cristo ¿Por qué la sombra del brazo derecho está más bajo que la del izquierdo? ¿Por qué no se ve la sombra de los pies? ¿Porqué en el suelo se ve proyectada la cruz y no el cuerpo?



La composición, al trazar las diagonales y luego una línea vertical por el punto de intersección de dichas diagonales vemos que coinciden el borde interno del pie derecho y los dos pequeños hexaedros del lado derecho, así como la rodilla del lado derecho y lo que es lo más importante: es exactamente la mediana de la cruz hipercúbica.
Las diagonales cortan prácticamente por los dos vértices inferiores del hexaedro central.
En cuanto a la sección áurea, vemos la línea superior que cruza por el centro de la arista inferior del hexaedro central. La línea inferior corta los dedos de los pies y los ojos de Gala. Esto indica que el punto de vista de la figura de Cristo es justamente los ojos de Gala para que nosotros lo veamos desde esa misma altura aunque la línea de horizonte está más abajo, la cruz  la vemos con respecto a la línea de horizonte lo que es una contradicción tener un punto de vista para la cruz y otro diferente para la figura de Cristo.
Podríamos resumir que Dalí representa el cuerpo místico de Cristo como perteneciente a la cuarta dimensión o bien es el momento de la transición de la tercera a la cuarta dimensión. Gala representa a la humanidad que contempla arrobada este proceso.




3 comentarios:

Aida da Luz dijo...

Dalí fué, con sus pros y contras, con su divismo y su surreal percepción de las cosas, un génio! Y quizás, esa forma de ser, ha contribuido a ello. Aunque también puede, que el devenir de las cosas, hayan cambiado algo, su trayectoria artística! A mas divo,más genio y viceversa! Pero el caso es que ahí está! Tu explicación, genial, de como ha pintado esta obra, me ha interesado.mucho y si es posible, me gustaría que,otra vez, nos explicaras, el cuadro que más me asombra, de Dalí. Que no el que más me gusta, aunque de los que más, que es el de Abraham Lincoln, Gala desnuda, mirando al mar, en cuadrícula! Es asombroso!
Gracias,Antonio!

Sangil dijo...


Sin duda que fue un genio con un dibujo fuera de serie y unas ideas originalísimas. Además su temática fue muy variada. Buscaré la foto y cuando tenga un rato estudiaré esa obra de Abraham Lincoln
Muchas gracias Aida por tu comentario

Aida da Luz dijo...

Gracias, a ti!