Herodes el Grande en el poder, un censo y una constelación extraña en el cielo. Y todo eso ocurre en el 7 antes de Cristo. Aunque suene extraño, Jesús nació entonces en el año 7 antes de Jesús. Es el único modo de argumentar todo lo que la Biblia dice. Si Cristo nació en el 7 antes de Cristo, ahí todo se ordena bien.
Cuando se dio la primera de las tres conjunciones Júpiter Saturno, se produce cada 120 años, es una conjunción normal. Extraño es cuando es triple. Esa sí que es rara, y más extraña aún en Piscis. En Piscis ocurre cada 740 a 900 años. ¿Entendido? En Piscis no se vuelven a encontrar en, como mínimo, 740 como máximo 900 años. Pero triple es una cosa rarísima, una cosa extraordinaria, espectacular, excepcional que efectivamente marca que ahí empieza algo, una Era diferente.
Cuenta que el observatorio “Sipar” -así se llama- en el Éufrates, encontró todo los datos que hablan de la primera aparición de la conjunción Júpiter-Saturno. Y dice, cito: “se vio a Júpiter y Saturno por primera vez en el cielo separados a 16 grados entre sí. Júpiter aún estaba en Acuario y Saturno ya estaba en Piscis e iban a encontrarse. La primera aparición fue -y esta fecha la voy a dar en clave, pero te estoy diciendo el nombre en calendario lunar hebreo, lo único que tienes que buscar es las correspondencias- el Trece de Adarú de la era trescientos cuatro de las Seleúcidas”.
Las Seleúcidas inician su imperio en el 312 AC. Entonces el año 304 de su era coincide con el 7 AC. Esto sucedió el trece de Adarú.
Como máxima aproximación –pues les mencioné que este tema es en el cual me abstengo de precisiones finales- vale agregar que coincide con estudios modernos y contemporáneos, como el de Garnier Malet, cuya estimación de la fecha de Nacimiento de Jesús, la ubica cercana al 20 de Marzo.
Paralelamente, Flavio Josefo consigna el 13 de Marzo del 4 AC como el eclipse alrededor del cual ancla los referentes que son utilizados para calcular la fecha del Nacimiento de Jesús.
Es decir, las fuentes más diversas, todas señalan siempre este rango alrededor del Día Clave del 13 de Adarú del 7 antes de Cristo.
Es muy importante también advertir, que esta conjunción Júpiter Saturno se produjo otra vez hace no tanto: En el Inicio de Piscis de 1961. En 1961 se volvió a producir la conjunción del nacimiento de Cristo.
Y algo más, también de fundamental importancia: completamos diciendo que el 13 de agosto de 1999 se produjo una constelación en séptima. ¿Qué es una constelación en séptima? Siete planetas se juntaron el día del eclipse de Sol último del siglo y dos de esos 7 planetas son Júpiter y Saturno. ¿Qué quiere decir? Que lo que está por empezar con el cambio de era cerca- no al 2000 -el 2012- incluye a lo que pasó dos mil años atrás con Cristo pero es 5 veces más importante, porque incluye 5 planetas más.
Por favor comprendamos lo que estamos diciendo: este Cambio de Era es más importante que el que propuso Cristo. Has escuchado algo: tú elegiste encarnarte en este Cambio de Era, mucho más importante que el que ocurrió en la época de Cristo. Aquel con una conjunción doble, mira que tenemos historia para contar, dos mil años después estamos contando... Pero este es de siete planetas. 13 de agosto de 1999 último eclipse de Sol del Milenio, se produjo una estrella perfecta en el cielo con la tierra en el centro. La constelación de 7 planetas incluyó entre los 7 a Júpiter y Saturno. Y a su vez fue el día que casualmente se da a conocer la tercera Profecía de Fátima.
Volvamos a los Magos. Y además, que cuando llegaran, fueran tan distintos, que llamen la atención del pueblo como cuenta la Biblia que sucedió a punto tal de que inmediatamente fueron llevados ante el mismísimo rey Herodes. Por eso entendamos que el pueblo tal vez no vio la constelación, los esenios se lo hicieron saber a todos los que pudieron pero lo que sí vieron es que al tiempo, llegaron tres personajes muy extraños, muy ricos -por lo menos traían ofrendas de riqueza- y eso era imposible que les pase desapercibidos en un pueblo tan chico.
Entonces, son recibidos por el rey en persona, que está interesadísimo en lo qu
e le dicen. ¿Por qué, qué le dicen? en el cielo hemos visto una estrella de nacimiento.
Y acá hay un problema: estrella y planeta no todas las culturas lo diferenciaban. En ese sentido me voy a Egipto. Los “egiptanos” dicen: “el día que yo nací, que planeta reinaría, por donde quiera que voy que mala estrella me guía”. Como se ve, planeta y estrella están ubicados en el mismo lugar, ¿entienden? Ese es un recitadito popular egipcio -egiptano, o sea gitano-, que muestra que planeta y estrella no están diferenciados. No siempre se utilizan palabras distintas para planeta y estrella.
Y acá hay un problema: estrella y planeta no todas las culturas lo diferenciaban. En ese sentido me voy a Egipto. Los “egiptanos” dicen: “el día que yo nací, que planeta reinaría, por donde quiera que voy que mala estrella me guía”. Como se ve, planeta y estrella están ubicados en el mismo lugar, ¿entienden? Ese es un recitadito popular egipcio -egiptano, o sea gitano-, que muestra que planeta y estrella no están diferenciados. No siempre se utilizan palabras distintas para planeta y estrella.
Entonces le dicen, hemos visto su estrella en el cielo. La de un nacimiento. Y venimos a honrarlo. En ningún lugar dice que sean árabes, como se los pretendió hacer creer. Y tampoco que sean reyes. Lo que pasa es que, cuando esto decidió agregarse en la Biblia fue en el concilio donde se necesitaba -por cuestiones que en ese momento hacían a la política de la Iglesia incipiente- que Arabia se incline ante el papa, entonces para eso los reyes, con características árabes se inclinaron ante Jesús.
Le daba estatuto a lo que casualmente quería en ese momento lo que era el incipiente Vaticano. No importa, lo que sí importa es que la Biblia dice que eran Magoi. Y Magoi, por supuesto que traducido es “Mago”. Al mismo tiempo que también es, el que observa el cielo. O sea, eran astrónomos.
Vamos uniendo datos: astrónomos, de Oriente –del Este- con tanto interés una conjunción en el cielo como para presentarse, y que se presentan con tal majestuosidad que sean recibidos directamente por Herodes, por el rey. ¿Y el rey, qué les dice? Para entender lo que Herodes les dice, hay que entender que los judíos trataban de guardar en secreto, que Herodes no sepa del nacimiento de Jesús. ¿Por qué? Porque si nacía el Mesías, el Sanedrín estaba contentísimo porque iba a tener auténticamente una cabeza davídica, ¿pero qué papel pasaba a tener Herodes? Entonces trataron de que no se enterara Herodes.
Ningún historiador cuenta el infanticidio. ¿Cómo no lo iban a contar? Herodes tenía historiadores propios y contrarios y ninguno cuenta que Herodes haya hecho un infanticidio, el único que dice eso es Don Lucas. Nadie más.
Pero lo que sí existió, fue que a Herodes -no olviden, Herodes el grande, ¿qué era? Idumeo, ¿y eso qué significaba? todo el pueblo continuamente lo desprestigiaba- no le gustaba ni un poco la idea de que nazca el Rey legítimo de una vez. No se podía oponer, obviamente, pero tampoco quería que se sepa mucho qué pasaba con ese nacimiento, porque el primer amenazado era él. ¿Se entiende eso? Nace un verdadero Rey, ¿qué hacemos con ese rey marioneta? Es perfectamente equiparable a: supongamos que llega de verdad Cristo hoy ¿qué hacemos con el Papa?
Bien, entendiendo esto entendemos algo más. A Herodes, el Sanedrín no trató de hacerle saber que se había producido el nacimiento del famoso primogénito varón, de la familia de la simiente de David y de Aarón. Lo que sí trató de hacérselo saber, es la casualidad: vinieron aquellos que llegaron a la ciudad y tenían que preguntar en algún lado, y empezaron a preguntar en la ciudad, dice la Biblia que preguntaban quién podía orientarlos acerca del nacimiento de un Rey, entonces llega a oídos del rey, que demostró que no por nada se sostenía como rey aún con todo el pueblo en contra: los manda a llamar con la estrategia de “Vengan y díganme quién es ese Rey que buscan, así yo también voy a honrarlo”
Una vez que se entera ¿qué hizo Herodes? no hizo un infanticidio, pero hizo algo parecido, simbólicamente: quemó las genealogías para que no pudiera demostrarse quién era quién.
Pues ese es el primer paso que constituye la mitología que constituye a un héroe: El héroe tratará de ser asesinado de niño, y no se lo pudo matar. Pasó con Moisés, pasó con Lamek, pasó con Noé, pasó con Krishna.
Hay tres requisitos para que un nacimiento sea de un héroe: uno, tiene que haberse salvado de una muerte. Dos, la madre es material. Tres, el padre es espiritual.
Y aquí tenemos todo el bingo completo: Cristo se salvó, en el mito, de un infanticidio. La madre era material y el padre era una voz en el cielo que de pronto fecunda.
Los tres requisitos son necesarios. Lo que sí ocurrió fue que Herodes mandó a quemar toda las genealogías. Por supuesto que la de David y la de Aarón estaban súper protegidas y se
salvaron, no las pudieron quemar, pero eso es lo simbolizado como infanticidio. Y en cierto modo, es como que haya matado a todos los niños, porque los borró de la historia al borrarles la historia: ya no se podía saber de dónde venían excepto el Héroe, por supuesto que “se salva de morir”.
Vemos como los evangelios repiten los mitos anteriores para reforzar la majestuosidad de Jesús, pues no podía ser menos que los Mesías anteriores de otras religiones.
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